Add parallel Print Page Options

Aquella noche Dios le habló en visión:

―¡Jacob, Jacob!

―¿Qué quieres, Señor? —respondió.

―Yo soy Dios —dijo la voz—, el Dios de tu padre. No tengas miedo de ir a Egipto, porque allí te haré una nación grande. Yo iré contigo a Egipto y haré que tus descendientes vuelvan de allí. Tú morirás en Egipto, y José estará a tu lado.

Read full chapter